Cada uno vino al mundo por algo y sobre todo para “hacer” algo. Creo firmemente en la teoría que afirma que cada uno de nosotros llegó al mundo porque tiene una misión por cumplir y algo que entregar. Ahora; que cada persona busque, encuentre o tan siquiera esté interesado en conocerse a sí mismo y encontrar “pa’ qué sirve” … eso es harina de otro costal (como dicen en mi país).
Como mi historia de los últimos años (desde que decidí salir a la luz y escarnio público), la conocen muchos, no creo que haya necesidad de ahondar en el por qué sigo en este mundo; dejémoslo en que una fuerza mayor me sacó de la inercia ridículamente somnolienta en la que estaba y me sacudió con la fuerza suficiente para que me diera cuenta de lo bendecida que estoy de tener VIDA … en este instante puedo decir que fue, es y será PURA CUESTION DE FISICA.
Mi proceso de rehabilitación a la adicción a martillarme el cerebro, comenzó hace unos años, poco a poco mi devenir iba dando paso al devenir de muchos que se encontraron conmigo en el camino. No creo ni en las coincidencias ni en las casualidades, todo pasa por algo, para algo y porque lo hemos creado. Las personas que están en nuestra vida, no están en ella porque sí … todos los seres con quien tenemos alguna relación directa o indirecta, nos están dando lecciones, son nuestros espejos, maestros y/o colaboradores de un camino que de nosotros depende que sea bonitamente andable, placenteramente vivible y extraordinariamente sentido.
Nacer, crecer, morir … volver a nacer, está presente en nuestras vidas TODOS LOS DIAS. Todo tiene un origen, una evolución, una etapa en la que decae, o cae, o desaparece … y una nueva en que todo se torna mucho mejor.
Vivir con afán ajeno, NO tiene sentido. Vivimos con el afán ajeno cuando nos comparamos, cuando relegamos nuestros sueños basados en pretextos, cuando el ruido de la sociedad es más fuerte que nosotros mismos, cuando apagamos nuestra voz interior para seguir con la corriente. Vivir con afán ajeno es no hacer un alto en el camino, es no atreverse a dar el paso, bajarse del bus y cambiar de dirección. Si vivimos la vida buscando pretextos o culpables siempre seremos aquellos que para cada solución tienen un nuevo problema.
Stop! … ya es suficiente … si llegaron hasta este punto en mi escrito es porque mis palabras resuenan en ustedes … y como dicen en mi tierra PAREN EL BUS (para el resto de países DETENGAN el bus).
#goforitnow